La realidad de data as an asset, la data como activo, ha estado presente para instituciones como los burós desde hace años. Sin embargo, existen nuevas iniciativas de negocios con data que abarcan un campo más amplio que solo el manejo de información por parte de las organizaciones y las invita a dar el gran paso de convertir este manejo en el centro de sus operaciones.
Esto requiere grandes pasos que les permitan a las organizaciones apreciar el valor real de la información, más allá de su rol de producto de una serie de procesos, y requiere entender el potencial de la misma para transformarse en una empresa centrada en su información.
Un ejemplo importante de un caso de éxito es el de Gulp Data, una empresa de fintech fundada en el 2021, pionera en su clase, que otorga préstamos a compañías emergentes utilizando data como base para el préstamo y que, para ello, emplea un proceso de tres pasos: llenado de un cuestionario, envío de información y oferta por parte de la compañía. Una empresa ejemplo de innovación financiera basada en datos.
El primer paso consiste en extraer datos básicos clave que serán posteriormente contrastados con una métrica preestablecida. El segundo paso es el envío de muestras significativas de la data que, con información adicional, será evaluada por la empresa. Por último, el personal experto de la compañía hará una oferta basada en la valuación de lo compartido.
De la misma manera, existen otros grandes actores que han tenido contacto directo con esta nueva forma, como American Airlines, LinkedIn y Microsoft, entre otras; siendo las dos primeras un gran ejemplo de ocasiones en las cuales la data de las compañías tenía un valor mayor al del mercado de la misma compañía.
American Airlines logró utilizar su data como una garantía que le permitió obtener préstamos por cantidades masivas, actuando como un activo de gran valor financiero.
En concreto, el programa y la información de viajeros frecuentes de la aerolínea fue valuado por analistas entre los 18 y 30 billones de dólares, más del doble del valor de la compañía. Por ello, utilizando el programa de viajeros frecuentes como colateral, la compañía logró recaudar 30 billones de dólares.
De la misma manera, otras aerolíneas como Delta y United han utilizado sus programas de fidelización como garantía para la obtención de algún beneficio económico.